Siempre he tenido por norma dice la autora- valorar mucho más el peor original que la mejor fotocopia. Y desde esta concepción holística de las capacidades individuales de todos y cada uno de los alumnos, su trabajo, tanto literario como pedagógico, ha tenido siempre como meta el sacar del pozo profundo que viene a ser cada ser humano, lo mejor que pueda haber en él. Para ello la creatividad ha sido el fuerte de sus métodos y estrategias, logrando un alto nivel de motivación y autoestima aún en los alumnos menos aventajados.
En la presente obra, Isabel Agüera maestra de la creatividad, la llaman sus alumnos-, nos ofrece una amplia gama de propuestas creativas de cara al dibujo, propuestas que, partiendo de elementales y variopintos recursos, pueden alcanzar un alto grado de auténticas creaciones artísticas, prestas a ser completadas, llegado el caso, con herramientas digitales que pueden imprimirle y acentuar un original y desconocido resultado.
La abundante obra de Isabel Agüera, tanto pedagógica como literaria, es considerada hoy día como referente imprescindible, tanto para padres, como maestros y alumnos ya que en ella pueden encontrar valores, sugerencias, motivación, ingredientes, en general, para todo educador que desee propiciar una enseñanza nueva.
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